El tejado de cualquier edificación es una zona imprescindible de la misma, ya que ayuda a regular la temperatura del interior de la construcción y sobre todo se erige como arma imprescindible antes las inclemencias del tiempo como humedades, vientos o nieve. Es por ello que mantenerlos en buen estado resulta una actividad esencial. Si estamos inmersos en una nueva construcción o estamos pendientes de reformar un tejado, en este blog te proponemos una alternativa eficaz para hacer de estos más resistentes y duraderos, gracias a la utilización de placas asfálticas onduladas.
Como placa ondulante asfáltica entendemos unas placas impermeables compuestas de fibras minerales y vegetales que debido a su forma ondulante sirven para ser colocadas debajo de las tejas o material que queda exterior en las cubiertas y que ayudará a prolongar el estado de estas construcciones.
Debido a su composición resultan totalmente ecológicas por lo que están libres de amianto y cualquier otro material tóxico que pueda dañar el medio ambiente o la salud de los inquilinos y por ellos algunos de los países más avanzados de Europa como Suiza o Francia ya son asiduos a contar con estos cómodos accesorios para la instalación y la mejora de todos sus tejados y cubiertas.
Asegurando una impermeabilización del 100% a partir de inclinaciones del 7%, estas placas ondulantes se han vuelto como decimos por toda una serie de ventajas que conllevan una tecnología indispensable en cualquier reforma de tejados. Entre ellas la principal, más allá de impedir humedades problemas con goteras y demás consecuencias de las lluvias y el mal tiempo, es que facilitan el trabajo, pues son muy fáciles de manejar y colocar con lo que la mano de obra puede reducirse. Además se adaptan a cualquier elemento de construcción, por lo que nos servirán sea cual sea la forma o dimensiones de nuestro tejado y por último, dada su forma ondulada, ayudan sirviendo como plantilla en la posterior colocación de tejas, impidiendo que puedan ser puestas de manera torcida o incorrecta e incluso evitando su posible posterior deslizamiento.
Su principal ventaja es que resulta un escudo clave frente a goteras y humedades, además de ayudar a regular la temperatura de los edificios disminuyendo hasta en 4 grados la temperatura. Dada esta resistencia a viento y agua su utilización es ya clave en la restauración de monumentos y patrimonio histórico como la Catedral de León o el parador de San Marcos.
Entre sus características más destacadas cabe resaltar que ayuda, por su composición, a evitar el deslizamiento de tejas, y favorece la ventilación debido a su forma ondulante que supone un doble circuito para el aire.
Existen muchas placas ondulantes de este tipo en el mercado dado su éxito, si bien el mayor fabricante a nivel mundial es la marca Onduline, presente en el mercado desde 1944, con una trayectoria en nuestro país de más de treinta años.
Por todas estas ventajas te recomendamos que si vas a llevar a cabo cualquier reforma en tu tejados te pongas en manos de profesionales que tengan experiencia y conocimiento en estos elementos de construcción indispensables para olvidarte de futuras reformas y problemas incómodos con goteras y humedades indeseadas.