Vivimos en un mundo que ya está caracterizado por la globalización. La conexión que existen entre las empresas, entre los países y entre los consumidores es más grande que en ningún otro momento de la Historia y es evidente que eso genera una enorme cantidad de sinergias que antes no existían y que, desde luego, son importantes en todos los sentidos. No cabe la menor duda de que la tecnología ha jugado un papel muy importante en lo que tiene que ver con esto y que, como es lógico, así va a seguir siendo de cara a los próximos años.